Vuelve a disfrutar de las cosas pequeñas como cuando eras niño para nutrir tu equilibrio emocional

¿Qué te lo podría impedir?

Solo necesitas recordar que hacías en tu niñez como te divertías, con que te alegrabas. Quizás aparezcan algunos recuerdos de como con sencillas cosas eras tan feliz, vuelve a intentarlo.

Gladys Franco Ruiz